Estamos en unas fechas en las que
comenzamos a adornar nuestras casas con motivos navideños, y hay quien dice que
no está el ambiente como para tirar cohetes, que dada la crisis actual en todos
los ámbitos no tenemos la alegría que teníamos antaño.
En parte tienen
razón los que por falta de fe no pueden ver más allá de la verdadera razón y
sentir de la Navidad, que es la celebración del Nacimiento de Cristo Jesús.
En este tiempo
de Navidad celebramos que el Rey de Reyes, el Príncipe de la Paz ha venido hasta
nosotros a morar en nuestro interior, en nuestra alma, y por lo tanto Él es el único
que puede traernos la Paz, y que aunque en este mundo todo se vea bajo el
prisma de la crisis económica, la crisis de valores, y la crisis religiosa, debemos
tener en lo más profundo de nuestro corazón la certeza de que la Paz es posible
por que Cristo vive entre nosotros.
Es que Jesús está vivo en
el cielo, en todas las partes de la tierra y especialmente en todos los
Sagrarios del mundo, en el Santísimo Sacramento del Altar.
Entones, que este
Jesús al que adoramos todos los meses en nuestras Vigilias Nocturnas, haya
acogido a nuestros hermanos adoradores que nos acompañaron en nuestras
Secciones y que a nosotros nos siga acompañando en nuestro apostolado para
mayor Gloria de Dios.
Estamos pues en el convencimiento de desearos Feliz Pascua de
Navidad y un prometedor año venidero 2015, donde podamos ver realidad todas
nuestras intenciones puestas en nuestras oraciones ante el Santísimo y nuestra
Santísima Madre Virgen María.
José Serna Sánchez
- Presidente del Consejo Diocesano -
José Serna Sánchez
- Presidente del Consejo Diocesano -
